Por: David Herranz
Ya está aquí la versión Spyder del Audi R8, una maravilla de deportivo que une a las rotundas prestaciones del modelo convencional la siempre atractiva opción de circular a cielo abierto.
El diseño lógicamente sigue las líneas generales del biplaza R8, al que le añade una capota de lona. Llaman la atención las espectaculares tomas de aires plateadas instaladas en la trasera del vehículo y las entradas de aire situadas por detrás de las puertas, dando un aspecto muy aerodinámico como no podía ser de otra manera. El material de fibra de carbono se ha utilizado para construir el compartimento de la capota y para las zonas laterales de la trasera. Otros detalles deportivos son su doble escape y las llantas de 19 pulgadas, con medida 235/35 delante y 295/30 detrás.
Al estilo de otros modelos deportivos de Audi la carrocería del R8 está fabricada en aluminio mediante la tecnología ASF. Es un chasis fabricado por partes, reforzando las zonas que más sufren a altas velocidades y elevando la calidad del conjunto dinámico. La adición de la capota no merma demasiado, el centro de gravedad sigue siendo bajo y el peso total del coche se situá en 1720 kilos. El techo se abre o cierra con un sistema electrohidraúlico que tarda 19 segundos en realizar la acción. Acción que se realiza también en marcha siempre que no se superen los 50 km/h. Para circular a algo más de velocidad Audi ofrece un cortavientos fácil de instalar.
Cuando si que es inviable el despliegue de la capota es a medida que vamos comprobando lo que da de sí el coche. La versión Spyder sigue montando la misma motorización que el R8 convencional, con mínimas modificaciones en las cifras por el aumento de peso. El motor V10 5.2 FSI de 525 CV y 530 Nm de par catapulta al Audi R8 Spyder hasta los 313 km/h de punta y una radical aceleración de 0 a 100 en 4,1 segundos. Para gestionar ese caudal de potencia tenemos el cambio secuencial de seis velocidades R tronic, con el que podemos alternar la marcha en automático o manual mediante levas al volante, cada vez más extendido. Para ayudar en las salidas se ha desarrollado el llamado Launch Control que apura toda la potencia mediante la gestión electrónica del embrague.
Para domar el coche este cuenta con tracción Quattro con especial atención al eje trasero, donde se combina con el diferencial de bloqueo para una conducción precisa y bastante exigente. El R8 Spyder también se aprovecha de la experiencia de la marca alemana en la competición para importar sistemas como el Audi Magnetic Ride, unos amortiguadores se adaptan en milisegundos por sus propiedades magnéticas. El conjunto dinámico se completa con frenos cerámicos opcionales y ESP con función deportiva totalmente desactivable.
En cuanto a equipamiento la gama R8 supone el más alto estándar de Audi. Por tanto incluye sistema de sonido Bang & Olufsen, volante deportivo multifunción achatado, sistema de navegación Plus con MMI, faros con luces LED y un novedoso micrófono opcional situado en el cinturón de seguridad para hablar sin problemas con el manos libres también con la capota abierta.
El Audi R8 Spyder ya está disponible en los concesionarios a un precio de 175.100 euros en la versión con cambio manual y 183.220 euros en la versión con cambio R tronic.
Más información en la web de Audi.
